La aromaterapia es el uso de fragancias para ayudar a aumentar la sensación de bienestar físico y emocional. Su uso se ha documentado desde hace mucho tiempo, donde ya se usaban aceites extraídos de plantas por los curanderos como tratamientos para diversas enfermedades y dolencias. Los beneficios en la salud y el bienestar del uso de aromaterapia son muchos, y van desde reducir los síntomas de ansiedad y depresión, aliviar tensiones del día a día, hasta ayudar a relajarnos y dormir bien por la noche.
Hemos reunido los productos de aromaterapia más habituales para que empieces a probarlos en casa. Encuentra el estilo correcto que mejor se adapte mejor a tu hogar y a tu vida.
Difusores de aromaterapia
Uno de los métodos más frecuentes para la introducción de la aromaterapia en el hogar es a través de difusores de aroma, entre los que destacan los Mikado y los Difusores Eléctricos.
Ambientador Mikado
Es un difusor de aroma que no consume ningún tipo de energía, perfumando y decorando de manera natural cualquier estancia. Usan varillas de fibras (cañas de ratán, varillas de algodón o varillas sintéticas) para evaporar el aroma y al contacto con el aire evaporar la fragancia de una manera prolongada, homogénea y constante. Los Mikado son muy simples y decorativos, constan simplemente de un recipiente que contiene el aroma y las varillas difusoras.
Difusores eléctricos
Es el más versátil de los difusores ya que permiten intercambiar fragancias, son regulables en intensidad modificando la cantidad de esencia o concentrado que se añada y tienen la ventaja de que decidimos cuándo usarlo. Su funcionamiento puede ser mediante pilas o conectados a la corriente eléctrica. Los hay de diferentes tipos, siendo los más comunes:
- Nebulizadores: no usan ni calor ni agua, sino un nebulizador que presuriza los aceites en átomos.
- Ultrasónico: dispersa el aroma como una niebla ultrafina creada mediante un proceso adiabático (sin calor) producido a través de frecuencias electrónicas que crean vibraciones que se utilizan para descomponer las moléculas, difundiendo el perfume en estado gaseoso.
- De calor: funcionan calentando el aceite hasta que se vaporiza, liberando su aroma en el aire.
- Humidificadores: combinan la función del humidificador ayudando a mantener el nivel de humedad óptimo evitando la sequedad del ambiente, a la vez que mejora la calidad aromática del ambiente.
Pulverizadores de aromaterapia
Para una inyección instantánea de fragancia, los pulverizadores en spray son la solución ideal. La manera más sencilla de perfumar una estancia, teniendo el control sobre la intensidad de la fragancia. También son ideales para rociar flores secas o «potpourris» y aromatizar una habitación.
Velas aromáticas
Ayudan a establecer la atmósfera deseada mejorando el ambiente, combinando aromaterapia e iluminación. Donde mejor funcionan las velas aromáticas es en el dormitorio y en la sala de estar, creando un ambiente agradable y lleno de deliciosas fragancias. Este tipo de velas estimulan los sentidos y generan emociones, pero debemos tener cuidado de no combinar demasiadas velas aromáticas en una misma sala ya que puede ser demasiado abrumador y algunos aromas no se mezclarán bien.
Quemadores de aceite
Un básico en la aromaterapia. Su uso es muy sencillo, simplemente añadir unas gotas de esencia o aceite en un poco de agua en la parte superior del quemador y encender una vela en la parte inferior. El calor hace que la mezcla se evapore consiguiendo un agradable aroma por toda la estancia.
A mayores de todo esto, tenemos a nuestra disposición otros métodos para introducir la aromaterapia en nuestro hogar como puede ser el incienso (un clásico), los jabones y sales perfumadas para el baño, los sobres aromáticos para armarios o cajones o incluso los ambientadores de coche.
Independientemente del tipo que mejor se adapte a nuestras necesidades y estilo de vida, la aromaterapia es una excelente manera de reducir el estrés y la ansiedad, mejorar el sueño y mejorar el estado de ánimo.
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